LA AGENCIA ANDALUZA DE FLAMENCO HOMENAJEARÁ EN UN ESPECTÁCULO A
ARTURO PAVÓN
05.06.07
Cuando se cumplen dos años de su muerte la Agencia trabaja para recuperar la memoria de este artista cumbre de la historia del flamenco
Cuando se cumplen dos años de su fallecimiento -6 de junio de 2005- la Agencia Andaluza de Flamenco de la Junta de Andalucía está diseñando un espectáculo para homenajear al gran pianista flamenco Arturo Pavón. El espectáculo se estrenará en Sevilla el primer trimestre de 2008.
Arturo Pavón es uno de los principales impulsores de la introducción del piano en el flamenco, abriendo el camino para otros más jóvenes. La formación clásica de Arturo Pavón -Real Conservatorio Superior de Música de Sevilla- y los importantes antecedentes artísticos de su familia -sobrino de Tomás Pavón y La Niña de los Peines- son otras claves de su arte.
Gran parte de su carrera artística se ha desarrollado en el acompañamiento al cante o al baile, puesto en el que ha recorrido numerosos festivales y tablaos, especialmente en Los Canasteros (Madrid). La mejor pareja artística es la que formó en 1954 con su mujer, Luisa Ortega, pero también ha tocado innumerables veces para Manolo Caracol. Ha grabado discos en solitario y ha colaborado en los de otros artistas flamencos, como en Mi secreto pirata (1995) de Vicente Soto Sorderita, donde Arturo Pavón interpreta al piano el tema Caracoleando.
La estirpe flamenca de Arturo Pavón no se termina con él. Ha tocado para sus hijas, la bailaora Jordana y la cantaora Salomé Pavón, que ya han dado muestras de pertenecer a esta mítica dinastía de artistas.
Además, muchos son los pianistas flamencos actuales que reconocen a Arturo Pavón una referencia fundamental: Pedro Ricardo Miño, Felipe Campuzano, David Peña Dorantes o Sergio Monroy, entre otros.
No en vano, Arturo Pavón fue, junto con el maestro José Romero, el primer pianista flamenco, el que supo dar con la melodía adecuada para inventar un lenguaje característico. Como concertista es autor de una importante y extensa obra, en la que destaca la Suite flamenca, de 1966, para piano y orquesta.
Fue también acompañante habitual de su mujer y de suegro Manolo Caracol. Aunque su debut lo hizo al lado de la Niña de los Peines, cuando regresó a los escenarios en 1949 con el espectáculo “España y su cantaora”, antes de retirarse definitivamente de las tablas en la temporada siguiente.
Pero lo que se dice admiración, Arturo Pavón la sintió por Manolo Caracol. “Costaba mucho trabajo meterle al público el flamenco. Ya me dirás lo que es cantar en sitios de España donde el flamenco se desconocía por completo, y allí sonó por primera vez. Y eso se debe a mi suegro, porque a las siete de la tarde, cantar por seguiriyas... ¿sabes lo que es hacer sentir a la gente a las siete de la tarde? Levantar el telón, cantar por seguiriyas, por soleá, por bulerías, y meterte a la gente en el bolsillo. Lo difícil es llegar a ser Caracol. Creo que como ha salido Caracol al escenario no ha salido ningún artista de los que ha dado el flamenco.”
Los últimos años profesionales del Pavón pianista y director de orquesta se desarrollaron en el tablao que montó su suegro en Madrid en 1962, Los Canasteros. Producido por Teo Cardalda había dejado su piano para el debut discográfico de su hija Salomé.
No en vano, Arturo Pavón fue, junto con el maestro José Romero, el primer pianista flamenco, el que supo dar con la melodía adecuada para inventar un lenguaje característico. Como concertista es autor de una importante y extensa obra, en la que destaca la Suite flamenca, de 1966, para piano y orquesta.
Fue también acompañante habitual de su mujer y de suegro Manolo Caracol. Aunque su debut lo hizo al lado de la Niña de los Peines, cuando regresó a los escenarios en 1949 con el espectáculo “España y su cantaora”, antes de retirarse definitivamente de las tablas en la temporada siguiente.
Pero lo que se dice admiración, Arturo Pavón la sintió por Manolo Caracol. “Costaba mucho trabajo meterle al público el flamenco. Ya me dirás lo que es cantar en sitios de España donde el flamenco se desconocía por completo, y allí sonó por primera vez. Y eso se debe a mi suegro, porque a las siete de la tarde, cantar por seguiriyas... ¿sabes lo que es hacer sentir a la gente a las siete de la tarde? Levantar el telón, cantar por seguiriyas, por soleá, por bulerías, y meterte a la gente en el bolsillo. Lo difícil es llegar a ser Caracol. Creo que como ha salido Caracol al escenario no ha salido ningún artista de los que ha dado el flamenco.”
Los últimos años profesionales del Pavón pianista y director de orquesta se desarrollaron en el tablao que montó su suegro en Madrid en 1962, Los Canasteros. Producido por Teo Cardalda había dejado su piano para el debut discográfico de su hija Salomé.